viernes, 17 de enero de 2014

Decálogo de Whatsapp



Desde que esta práctica herramienta se adentró en nuestras vidas ha pasado de ser un importante recurso de ahorro, a todo un fenómeno social con grandes repercusiones en lo que a relaciones personales respecta. 
En esta ocasión, obviaré los aspectos de control y sus consecuencias en las relaciones de pareja, para centrarme en una serie de pautas que considero fundamentales para hacer un buen uso de tan popular aplicación. Como suelo decir, nuestros padres y madres no nos han podido educar en este tipo de prácticas, y somos nosotros mismos quienes tenemos que aprender a manejarnos con ellas para el día de mañana enseñar a la siguiente generación. De ahí la importancia de tomar conciencia del tipo de uso que hacemos, y sus posibles consecuencias.

Dicho esto, os presento mi decálogo, con el principal objeto de hacer que la herramienta esté a servicio del usuario, y no el usuario al servicio de la herramienta:

  1. No respondas inmediatamente si no quieres o no puedes: en la medida de lo posible considera a Whatsapp como lo que es,  que no es otra cosa que un sistema de mensajería que sólo deberías usar cuando tengas disponibilidad o lo consideres oportuno. No olvides que no es una llamada telefónica, y en tal caso, tampoco tendrías porqué atenderla de inmediato. 
  2. Cuando hables en persona, lo importante es tu contertulio, no tu teléfono: se puede considerar de mala educación consultar o responder cuando estás en una conversación real con otra persona. 
  3. En los grupos, intenta que tus mensajes sean significativos, y si quieres comentar algo particularmente a alguien, hazlo por privado. Recuerda lo poco que te gusta revisar un grupo y comprobar que hay 239 mensajes y que nadie haya dicho nada importante.
  4. Si no te gusta un grupo, sal lo antes posible: aunque puedas silenciar aquellos que no te interesen, todavía no existe la posibilidad de deshabilitar sus notificaciones. Por otro lado, si lo abandonas, puede que no sea bien recibido por sus participantes, así que si ves que el grupo no te interesa, o sus participantes no hacen un uso debido, sería recomendable dejarlo con la mayor premura posible. 
  5. En conversaciones privadas, procura despedirte. No hay que hacer referencias como D´artagnan ni despedidas a lo "Sonrisas y Lágrimas", pero al menos no dejes a la otra persona esperando un posible mensaje. Si inicias una conversación, haz por terminarla o despídete hasta cuando puedas atenderla.
  6. A pesar de ello, puedes mandar mensajes significativos por sí mismos sin que tengan porqué comenzar una conversación. Por ejemplo, alguna foto simpática, un feliz año nuevo y cosas así.
  7. Sí vas a compartir fotos de alguien, ya sea individualmente o en grupo, asegúrate de que tienes su autorización. Es probable que a ti no te guste que una foto tuya escribiendo con tu ordenador en el baño esté dando vueltas por la red, así que pide permiso antes de difundir.
  8. Silencia la aplicación en el trabajo, cine, reuniones importantes y demás, ya que si ocurre algo importante podrían llamarte, e incluso en ese caso recomiendo que dejar el móvil en vibración. Que en una reunión con tu jefe suene "Bad Romance" de Lady Gaga puede que no dé muy buena imagen de ti.
  9. Excluyendo el caso de los grupos, a pesar de que recomiendo no estar pendiente del móvil procura antes o después atender a las personas que han querido iniciar una conversación contigo. No es necesario que te excuses por no haber contestado, porque recordamos que es un sistema de mensajería a nuestro servicio, no al revés.
  10. Evita los mensajes en cadena, es decir, no caigas en los clásicos mensajes en que antaño hacían echar humo a nuestro viejo "Hotmail". Especialmente aquellos que suelen decir: "si no lo reenvías a 10 personas, tendrás 10 años de mala suerte", o cosas con peor gusto.
Evidentemente lo que acabo de plantear es mi perspectiva, y puesto que considero el presente "post" completamente "abierto" estudiaré tus propuestas, sugerencias e impresiones si decides compartirlas. 

Espero que lo hayas encontrado útil, y que La Fuerza te acompañe.

Imagen con licencia libre cortesía de Rodrigo Iglesias.

6 comentarios:

  1. Una excelente adaptación del trato educado y respetuoso que todos deberíamos aplicar en nuestras relaciones personales directas a una herramienta de comunicación como Whatsapp.
    Añadir una nota de carácter tecnológico: Whatsapp presenta serias vulnerabilidades en cuanto a seguridad,siendo relativamente sencillo acceder a las conversaciones de sus usuarios rompiendo la privacidad de las mismas.No pretendo causar alarma,sino que se tenga cierta prudencia a la hora de conectarnos a redes ajenas a las habituales.
    Un saludo maestro.

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    1. Me alegra que le guste, Capitán.

      Ciertamente, la privacidad queda en entredicho con Whatsapp, más si cabe a través de conexiones Wifi, según tengo entendido. Lo tendremos en cuenta.

      Por cierto, si su nombre viene por el gran Brannigan de Futurama, le invito a visitar la siguiente entrada de otro de mis blogs:

      http://miblogdeautoayuda.blogspot.com.es/2013/02/futurama.html

      ¡Saludos!

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  2. Buenas compi!! Yo no soy mucho de dar mi opinión pero este decálogo me ha llamado mucho la atención y por ello quiero hacerlo.
    Llevo un mes sin móvil...tuvo un accidente y aun sigue en la UCI, espero que esta semana ya le den el alta. Al principio parecía ir por la calle "desnuda", me sentía agobiada porque no tenía móvil, no lo llevaba en mi bolso, no iba a sonar el silbido del whatsapp...sin embargo, fueron pasando los días y...esa sensación de dependencia, de desolación por sentirme incomunicada, han desaparecido por completo y me siento más libre que nunca. No ando atada a él... Si estoy programando o corrigiendo en casa, estoy centrada en lo que estoy haciendo; si estoy jugando con mis hijos estoy al 100por100...cosa que antes no era así...todas las actividades eran "paradas momentáneamente" para mirar el whatsapp....así que....estoy completamente de acuerdo contigo en lo que dices...y....por mi parte espero que, cuando vuelva a tener mi móvil, haga un buen uso de él.

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  3. En muchas ocasiones suelo comentar que cuando hice El Camino de Santiago, además de ser una experiencia que recomiendo a todo el mundo, estuve una semana con mi móvil a más de 800 kilómetros. Ciertamente, al no contar con este dispositivo vuelves a poner los pies literalmente en el suelo, y tiendes a centrarte en lugar de sumergirte en la continua multitarea a la que estamos acostumbrados.

    Hoy día es conveniente estar conectado, pero como dices, habría que hacerlo de una forma más equilibrada, y tomar descansos como el que ahora estás disfrutando (Personalmente, hace un año que me tomé el mío, y creo que debo volver a tomarme otro).

    Muchas gracias por participar, seño Conchi.

    Un abrazo.

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  4. Hola Pepe, probablemente para cuando mis hijos anden con móviles, no podré enseñarles nada ni educarlos en su tecnología, que nos sobrepasará. Seguramente la educación fundamental será en lo no tecnológico para que lo tecnológico se vea como un medio y no como un fin. No voy a pagar un euro por el guasap. Abrazos.

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  5. "Educación en lo no-tecnológico para que incida en lo tecnológico"... muy buenas idea (Creo que así, y como mínimo lo hicieron tus padres y los míos) Un abrazo, amigo.

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